Comunicación PSOE 
Hoy el PSOE ha reunido a los medios de comunicación para hablar de lo que está pasando con los jóvenes en Almansa, tanto de los más mayores que quieren empezar a llevar una vida independiente como de los adolescentes de nuestra ciudad.
Desde hace unos meses el PSOE está llevando a cabo grupos de discusión con personas de Almansa de todos los perfiles y edades y en todos ellos el mayor problema que se detecta es la situación de los jóvenes: la falta de perspectivas laborales y de oportunidades para los perfiles más cualificados, las dificultades para emprender una vida independiente, la falta de vivienda y una enorme falta de oferta de ocio tanto para los jóvenes más mayores como para los adolescentes menores de edad.
Esta problemática hizo que en la última revista del PSOE incluyéramos un reportaje sobre la marcha de centenares de jóvenes por falta de oportunidades laborales. Según el estudio que realizamos más de 500 jóvenes de Almansa de entre 26 y 35 años se ha empadronado en otra población, una cifra que en los mayores de 30 llega al 25% de cada generación, es decir, uno de cada cuatro.
Más de 500 jóvenes de Almansa de entre 26 y 35 años se ha empadronado en otra población
Todos sabemos, además, que esta cifra es mayor, puesto que muchos de los jóvenes que no viven aquí siguen empadronados en Almansa porque solo se desempadronan cuando en el lugar donde viven se lo exigen para cumplir algún trámite.
Esta marcha de, al menos, una cuarta parte de la población joven está dejando un gran vacío que empieza a notarse ya como falta de actividad y tendrá consecuencias para el desarrollo futuro de Almansa, con una población cada vez más envejecida.
Las soluciones, como explicamos en el artículo, ni son sencillas ni a corto plazo, y es más fácil decirlo que hacerlo, pero hace falta llevar a cabo una política que pueda invertir en el tiempo esta tendencia. En primer lugar, es necesario aumentar la oferta de puestos de trabajo en Almansa y diversificar la industria para que perfiles más diferentes puedan encontrar aquí trabajo.
También hay que dar facilidades para la formación de los jóvenes en profesiones que se puedan desarrollar en Almansa, apostando por la Formación Profesional y eso pasa por aumentar la oferta local y también por dar facilidades a los jóvenes para que accedan a la FP de poblaciones cercanas como Albacete, Villena, Yecla o Xátiva.
Es necesario aumentar la oferta de puestos de trabajo en Almansa, diversificar la industria y dar facilidades para la formación de los jóvenes en profesiones que se puedan desarrollar en Almansa
Por otro lado, la principal industria donde sabemos que va a haber empleo por el cambio generacional es en el calzado, sin embargo, por la dureza de sus condiciones laborales casi nadie piensa en él como primera opción. No hay jóvenes formados ni ganas de trabajar en una industria que día a día va empeorando sus condiciones de trabajo.
En cuanto a la calidad de vida Almansa, lo que nos dice la gente es que no es una ciudad atractiva para la juventud. No se identifican con la oferta cultural y de ocio que está orientada a un público o más mayor o más pequeño, y tampoco hay un parque de vivienda atractivo o asequible.
Mientras, nuestro alcalde y su equipo de gobierno viven completamente de espaldas a esta realidad, y sus políticas para jóvenes parecen querer tenerlos eternamente en una ludoteca, sin darse cuenta que cada edad tiene unas demandas y unas necesidades que no se están atendiendo.
Esto en lo que se refiere a los jóvenes más mayores, los que andan entre la veintena y la treintena, pero también vamos a referirnos a los adolescentes, a los que aún no han llegado a la mayoría de edad. Para estos jóvenes Almansa ofrece el vacío absoluto, en estas edades lo que los jóvenes piden es solo una cosa: poder juntarse y compartir su tiempo de ocio.
Las políticas en esta materia que se han aplicado han sido casi exclusivamente combatir el botellón en la calle, que ha disminuido mucho hasta casi haberse erradicado y combatir los garitos donde estos jóvenes se reunían… una política de persecución que no ha tenido ninguna contraprestación, no se han ofrecido alternativas. No criticamos que se tienda a desincentivar el botellón y los garitos, pero si eliminas estas prácticas, debes tener una oferta de espacios y de ocio que las suplan. En las encuestas estos jóvenes hablan de Almansa como una ‘cárcel’ donde no hay nada que hacer.
Estamos viendo un fenómeno que hasta la fecha era prácticamente desconocido en Almansa, que los adolescentes están buscando su ocio en las poblaciones de la comarca
Y fruto de esto estamos viendo un fenómeno que hasta la fecha era prácticamente desconocido en Almansa, que los adolescentes están buscando su ocio en las poblaciones de la comarca, en pueblos mucho más pequeños que sí ofrecen esos espacios abiertos de interrelación de los adolescentes están buscando y necesitan.
El fin de semana pasado, sin ir más lejos, el ayuntamiento de Montealegre organizó una fiesta de Halloween que se llenó de adolescentes de Almansa, chicas y chicos de 15 a 17 años que no encontraban qué hacer aquí y que se desplazaron 25 kilómetros para ir a una fiesta. Porque aquí no había nada para ellos. Y esto lo saben sus padres y madres que se organizan para llevarlos en coches para asegurarse que no tengan un percance.
Y esto no es un caso aislado, todavía están los adolescentes de Almansa hablando de las fiestas de Bonete en las que este año el Ayuntamiento ha tirado la casa por las ventana y a donde almanseños y almanseñas han acudido en masa. O la sala El Matadero de Ayora donde el ayuntamiento de la localidad vecina organiza conciertos de rock, de rap y fiestas.
Con una excusa u otra estos jóvenes adolescentes, y sus padres que los llevan y los traen, están encontrando en las poblaciones cercanas lo que en Almansa no encuentran. Porque aquí no quieren organizarse fiestas masivas, ni conciertos, ni festivales, ni nada que se parezca a los espacios y eventos que los adolescentes a esa edad quieren y necesitan. En vez de ejercer de cabecera de comarca, Roselló está fomentando todo lo contrario. Y lo que tanto Roselló como Calero deben comprender es que las políticas de juventud no pueden consistir exclusivamente en las actividades para los más pequeños que ofertan en el centro joven.
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